Origen del Tarot

El Tarot, es un sistema simbólico, que consta de 78 cartas, las cuales, están compuestas por 22 Arcanos Mayores y 56 Arcanos Menores.

La realidad, es que este sistema, resulta de una cadena ininterrumpida de transmisión de sabiduría ancestral, transferida de maestros a discípulos, que en sus orígenes era de forma oral, pero que luego, fue en forma escrita.

Si bien, no existen demasiadas pruebas concluyentes, acerca del origen del Tarot, muchos investigadores, afirman que se origina en Egipto, asegurando que resulta de un vestigio del Libro de Toth, y que, por otro lado, encontraron los Arcanos Mayores, en distintos jeroglíficos.

El libro de Thoth, fue salvado del incendio que destruyó los templos.

Toth, era el Mercurio de Egipto, considerado como uno de los primeros reyes, además de ser el inventor de la palabra y los jeroglíficos.

Más tarde, se le asignó el Tarot, una relación directa con la Cábala.

Luego, se difunde en toda Europa, y hacia el año 200 DC, en el que sucede la destrucción de la biblioteca de Alejandría.

Algunos adeptos ocultistas, como sabios, astrólogos y místicos, se reunieron en lo que hoy es Marruecos, y debido a que tenían barreras idiomáticas (ya que se reunión se efectuó entre judíos, sirios, tibetanos e indios), representaron unas claves pictográficas, que luego fueron conocidas como Arcanos Secretos.

Más adelante, hacia 1299, se menciona la existencia de naipes en un manuscrito de Siena.

Lo que actualmente se conoce como Tarot Rider Waite, asignan su origen en el año 1909, año en el en el que White, encargó a Smith, la producción de una serie de pinturas alegóricas del Tarot.

Se denomina Tarot Rider Waite Smith, debido a quienes intervinieron en su creación, ya que Waite fue el creador en 1903, Rider fue el impresor y Smith, la dibujante.

El Tarot Rider Waite, manifiesta la vida misma, la doctrina secreta del universo y todos sus ideales. Encierran en sus naipes, una simbología, totalmente alejada de la tradición oculta.

Muestra la relación y vinculación, con características del consultante y personas allegadas a quien efectúa la consulta. A través de la lectura, se obtiene una visión psicológica, determinando las características del consultante.

Es por eso, que el Tarot, no se considera predictivo, sino que resulta consecuencia de las actitudes psíquicas de un individuo, en un determinado momento.