Casa I

Esta casa, constituye el escenario de la vida donde inicia el primer soplo de vida, el primer contacto con la realidad material. Aquí, se señalan experiencias que marcarán nuestra huella, ya que esta zona de la carta, será aquella que mejor nos defina, ya que indica el papel preferente de cada uno de nosotros, lo que mejor nos identifica, lo más personal.

Por esta casa, se impregnan las primeras instancias psíquicas de las primeras experiencias durante la niñez y las influencias del entorno, tanto educativo como ambiental. Estas impresiones, que son fruto de las estructuras sociales, que actuarán en la adultez.

Aquí, comienza a marcarse su temperamento y su carácter que han ido configurando a través de las distintas experiencias, mostrando qué habilidades va adquiriendo para frenar sus impulsos y cuáles adquirió en sus primeros 30 años de vida.

Esta casa, coincide con el Ascendente y constituye el escenario de la edad temprana, en la que se observan acontecimientos que condicionan al sujeto, en el que comienza a aprender las costumbres, hábitos y todos los escollos que deberá enfrentar para superarlos.